Imagen: Lecturas
Curtain, baby, recto o micro… hay un flequillo ideal para ti
El flequillo ha vuelto, y no de cualquier forma. Este clásico de la peluquería regresa renovado, versátil y más adaptable que nunca. Ya no se trata de llevarlo como en los años escolares, sino de encontrar la versión que realce tus facciones, refleje tu estilo y se integre a tu ritmo de vida.
Si estás pensando en dar el paso (o volver a intentarlo), esta guía te ayudará a conocer los tipos de flequillo más populares, cómo cuidarlos y cómo saber cuál te queda mejor según la forma de tu rostro.
¿Por qué vuelve con tanta fuerza?
El flequillo enmarca el rostro, suaviza facciones y puede cambiar completamente un look sin modificar largo ni color. Además, permite jugar con la identidad: un aire romántico, moderno, rebelde o sofisticado… todo depende del corte y del styling.
En redes sociales, celebridades e influencers lo han puesto otra vez en tendencia, especialmente en versiones suaves, desenfadadas y fáciles de mantener.
Tipos de flequillo y sus efectos
1. Curtain bangs (flequillo cortina)
Suave, abierto al centro y desfilado a los lados. Ideal para quienes quieren un cambio sutil, sin cubrir completamente la frente.
Favorece: rostros redondos, alargados y ovalados.
Estilo: romántico, setentero, elegante.
Imagen: Glamour
2. Flequillo recto clásico
Cae justo sobre las cejas, denso y definido. Requiere más mantenimiento pero crea un look poderoso y simétrico.
Favorece: rostros ovalados o alargados.
Estilo: sofisticado, estructurado, con carácter.
Imagen: Druni
3. Baby bangs
Muy corto, por encima de las cejas o incluso a mitad de la frente. Aporta un toque audaz y vanguardista.
Favorece: rostros ovalados y con rasgos definidos.
Estilo: alternativo, retro, con actitud.
Imagen: Ipsy
4. Flequillo lateral
Corte diagonal que cae hacia un lado del rostro. Es fácil de manejar y de crecer si luego cambias de idea.
Favorece: rostros cuadrados, redondos o en forma de corazón.
Estilo: suave, juvenil, versátil.
Imagen: Vanitatis
5. Microbangs
Una versión más extrema de los baby bangs, con cortes rectos, cortos y muy definidos.
Favorece: rostros pequeños o de huesos marcados.
Estilo: editorial, atrevido, moderno.
Imagen: Vogue
¿Cómo saber si un flequillo te queda bien?
La clave está en equilibrar proporciones y resaltar lo que más te gusta de tu rostro. Aquí algunas guías básicas:
- Rostro redondo: curtain bangs o laterales, que alargan y estilizan.
- Rostro cuadrado: flequillos largos y suaves, que suavizan los ángulos.
- Rostro alargado: flequillos rectos que acortan visualmente la frente.
- Rostro ovalado: cualquier tipo, es la forma más versátil.
- Rostro en forma de corazón: flequillos ligeros y en capas para equilibrar la parte superior del rostro.
Pero más allá de la forma, también importa tu estilo de vida, tu rutina diaria y cómo te gusta sentirte con tu cabello.
Cuidados básicos para mantener tu flequillo en forma
- Lávalo con más frecuencia que el resto del cabello, ya que está en contacto directo con la piel y puede ensuciarse más rápido.
- Usa secadora o plancha con cepillo para darle forma en segundos.
- Ten siempre a mano un peine fino o cepillo pequeño, ideal para retoques rápidos.
- Córtalo con regularidad (cada 3 a 4 semanas) para mantener la forma.
- Aplica productos ligeros, como sprays texturizantes o mousse suave, para darle movimiento sin apelmazarlo.
¿Flequillo sí o flequillo no?
No hay una única respuesta. Lo importante es que el corte se adapte a ti, no al revés. Si tienes dudas, lo mejor es consultar con un profesional que te asesore según tu rostro, tu tipo de cabello y el resultado que estás buscando.
En Beserva puedes encontrar estilistas expertos que trabajan desde la escucha y el detalle, para ayudarte a hacer ese cambio que te emociona pero aún no te animas a dar sola.
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